Esta madrugada se celebrará la 96ª edición de los premios Oscar. Es el acontecimiento del año en cuanto a cine comercial se refiere y todos queremos poder comentarlo el lunes por la mañana en la oficina. El problema es que José Manuel, de contabilidad, sólo conoce Barbie y Oppenheimer y está muy ocupado viendo La Isla de las Tentaciones para mantener un debate coherente. Mi recomendación: mándale este artículo al Josema antes de la gala para que pueda prepararse unos argumentos con los que dárselas de entendido, a pesar de que hasta hoy creía que Pobres Criaturas eran sus hijos cuando se le olvida pasarle la pensión a su exmujer y que Los que se quedan habla del Espanyol en segunda división.

Os dejo, pues, siete claves para que todos (expertos cinéfilos y astutos ludópatas de oficina que queréis ganar la porra sin dedicar un segundo a ver cine) podáis disfrutar de esta gala sabiendo a lo que os exponéis.

1.- La Gala:

Lo primero que hay que tener en cuenta es la propia gala. Lo más importante este año es el horario, pues la ceremonia empezará a medianoche (hora peninsular española). Tradicionalmente, todo el tinglado daba comienzo a las 2:00h a.m, pero este año se juntan dos fenómenos:

  1. Desde Hollywood lo han adelantado todo una hora para captar más audiencia después de los malos números de los últimos años.
  2. Estados Unidos aplica el cambio de hora al horario de verano este fin de semana, mientras que en España se hará la madrugada del 30 al 31 de marzo. Por lo tanto, la diferencia horaria da la ventaja a aquellos que queremos trasnochar lo mínimo posible.

Por lo tanto, si queréis ver a vuestras celebrities favoritas desfilar por la alfombra roja, podéis conectar la retransmisión de Movistar+ desde las 22:30h – 23:00h. La gala dura unas tres horas, con lo que algo pasadas las 3:00h, seréis libres de meteros en la cama.

La ceremonia transcurrirá como viene haciendo los últimos años. Jimmy Kimmel volverá a conducir la gala, con lo que volveremos a tener chistes contados por alguien que no ha visto las películas (por favor, dadnos una gala presentada por los Teleñecos. ¿Acaso es tanto pedir?).

Para amenizar la gala, y como ya es habitual, entre entregas se interpretarán las cinco canciones nominadas en la categoría de mejor canción original. Este año, veremos a Scott George y a un coro de cantantes Osage interpretar Wahzhazhe, de Los asesinos de la luna; a Becky G interpretar The Fire Inside, de Flamin’ Hot: la historia de los Cheetos picantes (podemos decir que la peli dirigida por Eva Longoria sobre unas patatas fritas tiene más nominaciones que Asteroid City o Fallen Leaves); a Jon Batiste interpretar It Never Went Away, de su documental American Symphony; y doble actuación de Barbie: la favorita para el premio, Billie Eilish, interpretará la balada What Was I Made For?.

Pero seguramente, el momento más esperado de la noche será ver a Ryan Gosling interpretar I’m Just Ken acompañado de 65 bailarines masculinos en lo que será la actuación más grande (y gloriosa) de la historia de los Oscar. Nos perdimos a Ryan interpretar City of Stars hace 7 años, pero vamos a tenerlo dándolo todo como Ken.

2.- La noche de Oppenheimer

Me he enrollado mucho con la ceremonia, así que iré al grano con los premios. ¿Queréis un resumen rápido de cómo va a ir la gala? En dos palabras: Oppen, Heimer. Ya podéis marcar la X a favor de la iglesia Nolaniana en vuestra quiniela porque la cinta promete llevarse sin despeinarse los siguientes premios: Mejor película, mejor director (Christopher Nolan), mejor actor principal (Cillian Murphy), mejor actor de reparto (Robert Downey Jr.), mejor fotografía, mejor banda sonora, mejor sonido y mejor montaje.

Básicamente acostumbrad vuestros oídos a la frase “And the Oscar goes to… ¡Oppenheimer!”. Va a ser la gran triunfadora de la noche, como lo ha sido del año y de toda la temporada de premios. Recordemos que se ha llevado el premio a mejor película en los Globos de Oro, los Critics Choice Awards, los BAFTA, los premios del sindicato de productores (PGA) y el premio al mejor reparto en los premios del sindicato de actores (SAG).

3.- Mejor actiz principal: la carrera más igualada

Si bien hay muchos premios muy decantados a estas alturas, el de mejor actriz es todavía una incógnita. Hay dos candidatas muy fuertes: Emma Stone por Pobres Criaturas y Lily Gladstone por Los asesinos de la luna. Voy a comentar los puntos fuertes y débiles de cada una para que decidáis vosotros.

Emma Stone:

  • Protagonista absoluta de su película. Toda la película gira entorno a ella y a su punto de vista. Ella es, sin duda, el alma y corazón de Pobres Criaturas. Además, es productora de la cinta, así que lo convierte en un proyecto personal.
  • Superestrella. Todo el mundo conoce a Emma Stone. Josema de contabilidad ha visto siete películas en su vida, pero ha visto La La Land (Damien Chazelle, 2016) y The Amazing Spider-Man (Marc Webb, 2012). Su starpower y sus contactos en la industria la hacen una persona muy querida por la que los académicos pueden querer votar.
  • Tiempo en pantalla. A diferencia de Gladstone, Stone aparece a lo largo de toda la película. Nuestros colegas de Screentimecentral han contabilizado que Emma Stone aparece un 68,77% (1 hora, 37 minutos y 19 segundos) de Pobres Criaturas, mientras que Gladstone sólo un 27,29% (56 minutos, 13 segundos) de Los asesinos de la luna. Sólo cinco actrices han ganado el Oscar con menos tiempo relativo en pantalla: Louise Fletcher en Alguien voló sobre el nido del cuco (Milos Forman, 1975), Luise Rainer en El gran Ziegfeld (Robert Z. Leonard, 1936), Patricia Neal en Hud (Martin Ritt, 1963), Nicole Kidman en Las horas (Stephen Daldry, 2002) y Frances McDormand en Fargo (Joel Coen, 1996).
  • Película más querida. Pobres Criaturas es una sensación mayor y tiene más posibilidades de acercarse a ganar la mejor película que la película de Scorsese.
  • Papel más memorable. Bella Baxter tiene papeletas para ser uno de los personajes más recordados e icónicos de esta década. Disfraces de Halloween de Bella Baxter de aquí diez años no suena descabellado, mientras que el papel de Gladstone es mucho más convencional.

Lily Gladstone:

  • Nunca ha ganado el Oscar. A los académicos les suele costar multipremiar a actores y actrices, sobre todo si son jóvenes. “¿Merece Emma Stone tener dos Oscars con 35 años?” se preguntarán muchos votantes. En cambio, sienta muy bien disparar la carrera de una cara nueva con un galardón por un trabajo bien hecho.
  • Raíces nativo-americanas. Del mismo modo que el año pasado la narrativa de Michelle Yeoh como primera mujer asiática en ganar el premio a actriz principal, la ayudó a vencer a Cate Blanchett (que ya tenía dos Oscars. ¿Véis los paralelismos?); este año, Gladstone puede convertirse en la primera actriz perteneciente a los pueblos nativo-americanos en llevarse este galardón. Si Green Book ganó el Oscar a mejor película es ridículo pensar que la culpa blanca no juega un papel importante en este juego.
  • Victoria en los SAG. Los premios del sindicato de actores juegan un papel muy importante en esta carrera, y a los actores de Hollywood les suele gustar premiar aquellas actuaciones más exageradas y llamativas. Que una interpretación tan comedida como la de Lily Gladstone venciera a la explosión actoral de Stone en los SAG es un indicativo de que sus opciones son mucho más que reales.

4.- Guion original y guion adaptado

Antes de nada, recordaros que Barbie compite en la categoría de guion adaptado porque está basada en personajes preexistentes. Todos los remakes, secuelas, precuelas y subproductos van para allá. Lo digo porque después vienen las preguntas obvias en uno de los momentos clave de la noche y así nos ahorramos la explicación.

La categoría de guion original parece más decidida de lo que cabía esperar. Secretos de un escándalo y Maestro no tienen nada que hacer y su premio es la nominación (como suelen decir los perdedores), pero las otras tres contendientes parecían partir con opciones. Vidas Pasadas se ha quedado por el camino y esta es su única nominación además de la de mejor película. Esto mismo le pasó a Ellas hablan (Sarah Polley, 2022) el año pasado y ganó, pero su competencia era menor. Los que se quedan es un guion canónico de premios: es divertido, es triste, tiene diálogos muy frescos y no se complica demasiado a nivel estructural. Alguna opción tiene. Pero la triunfadora de esta carrera es Anatomía de una caída. Francia no la mandó como candidata a película internacional y ahora nuestros vecinos norteños se lamentan porque ha recibido 5 nominaciones en categorías importantísimas. Premiar su magnífico guion puede ser la compensación por no poder entregarle el galardón en la categoría internacional.

El guion adaptado está más abierto. La que parte con menos opciones es La zona de interés, que tiene un ritmo lento y muy poco diálogo. Su trabajo de adaptación de la novela de Martin Amis es encomiable, pero aquí no se premian este tipo de textos. Pobres Criaturas parece demasiado rara en su concepción y se está quedando un poco atrás en este aspecto. Además, a los Oscar les encanta premiar a guionistas/directores y Lanthimos no ha participado en el guion de Tony McNamara. Oppenheimer puede llevárselo si deciden darle premios hasta por estornudar, pero creo que van a aprovechar la oportunidad de diversificar un poco. Premiar a Barbie es muy tentador, porque tienes la oportunidad de subir al matrimonio Gerwig/Baumbach al escenario y redimirte ante la opinión pública por no nominar a Gerwig a mejor dirección. Era mi apuesta a lo largo de todo el año. Pero la nueva favorita es American Fiction, que se está llevando muchos trofeos para casa y venció en los BAFTA, donde ni siquiera estaba nominada a mejor película. Las comedias negras sobre temas sociales suelen gustar y es un guion facilito, accesible y funcional. Si hace un par de años ganaron los guiones de CODA y Belfast, tenemos que contar siempre con una buena Feel-Good adulta.

5.- Película de animación

¿Seguís aquí? Me alegro. Vaya turra guapa, ¿eh? Seguimos y nos vamos a la droga dura. Categorías secundarias que nos ponen de mala leche a las 2:07 de la madrugada. En película de animación la gran favorita es Spider-Man: Cruzando el multiverso, pero existe un mundo en el que El chico y la garza se lleva el gato al agua. En lo que viene siendo la temporada de premios, un par de entidades han premiado a Miyazaki con lo que parece ser un premio honorífico a la trayectoria. Tanto Miles Morales como Miyazaki tienen ya un Oscar en esta categoría, pero si el votante se plantea “¿quién merece un segundo galardón Espaiderman o la figura más importante en la industria de la animación desde Walt Disney?” puede pesar la narrativa. En cualquier caso, la espectacularidad de Cruzando el multiverso y el hecho de que sea americana la coloca en cabeza.

6.- Efectos visuales

“Gerard, suéltame el brazo”, “tengo cosas mejores que hacer que leer un párrafo sobre quién va a ganar el Oscar a mejores efectos visuales” o “apreciaba este blog cuando sus textos eran concisos y breves” son algunas de las cosas que me dicen las voces de mi cabeza a estas alturas. Pero es que esta categoría es un dolor de cabeza para cualquiera que quiera predecirla con un mínimo criterio. Para empezar, ninguna de las nominadas está en la categoría de mejor película, por lo que no hay nada que todo el mundo haya visto y adore. Voy a analizarlas en función de las probabilidades que creo que tienen:

5.- Mission Impossible: Sentencia Mortal

La última entrega de la saga de Tom Cruise conduciendo cosas no ha tenido mucho éxito de crítica ni de taquilla y parece algo olvidable. Además, farda del hecho de que Tom Cruise está loco y hace todas las piruetas él mismo, sin CGI, jugándose la vida. Por lo que cuesta detectar qué son efectos visuales y qué es demencia de la cara visible de la cienciología.

4.- Guardianes de la galaxia vol. 3

Ya lo sé. Ya lo sé. Lo que hacen con Rocket en esta película es tremendo. La cuestión es que NUNCA una película de MCU ha ganado este premio. Los Oscars odian al MCU si no está Black Panther. Me parecería mucho más que sorprendente que empezaran a premiar al universo de Kevin Feige cuando está empezando a morir y se concibe a estas alturas como un cáncer dentro del arte cinematográfico.

3.- Napoleón

A ver, esta ya me la creo más. El cine bélico se presta a premios técnicos. Como factor añadido, suele existir una correlación entre una nominación a mejor diseño de producción con ganar este premio. Y Napoleón es la única nominada en ambas categorías. A pesar de todo esto, la crítica ha machacado la película de Ridley Scott y los efectos no son muy evidentes, es decir, no hay un monstruo gigante de CGI.

2.- Godzila Minus One

Donde sí que hay un monstruo gigante de CGI es en esta película japonesa que se convirtió en un fenómeno para los amantes del cine de monstruos. Es la cinta que más ha gustado de las cinco nominadas y puede ser una forma de premiarla. Aún así, la academia suele preferir naves espaciales y mundos fantásticos a grandes bichos realistas – y si no, que se lo pregunten a Thanos-.

1.- The Creator

Una película que fue un fracaso de taquilla y crítica por el simple hecho de ser muy mala. Qué cosas. La premisa es prometedora para una película de ciencia ficción, pero el desarrollo es previsible y poco interesante. Lo que es innegable es el aspecto visual y la inclusión de los efectos visuales que elevan el universo que representa la historia. A falta de una candidata más querida, The Creator parece ser la opción que más se adapta a los estándares de la Academia.

7.- Documentales y cortos

“Gerard, me estás vacilando”. “He perdido toda la mañana leyendo esto”. “La gala de los Oscar se me va a hacer corta en comparación a este artículo”. No os falta razón, pequeños pepitos grillos, pero hay que hablar de lo que se comenta en las calles: las categorías favoritas para todos.

Para ser lo más conciso posible os daré dos pinceladas de algunas nominadas en cada categoría y nos vamos todos a descansar un rato. ¿Os parece?

Mejor largometraje documental: La favorita aquí es 20 días en Mariupol. Cinematográficamente no tiene demasiado más que el hecho de que el director se metió con sus santos huevos en medio del punto más caliente del conflicto ruso-ucraniano (y con conflicto quiero decir el ataque a un hospital pediátrico por parte del ejército de Putin). Pero la actualidad y las imágenes tristes gustan a los votantes, y la dureza de esta película no es fácil de olvidar. La tenéis en Filmin.

Mejor cortometraje documental: Creo que va a ir para The Last Repair Shop. Es un documental sobre muchos temas sociales en la ciudad de Los Angeles y cómo la música nos ayuda sobrellevar nuestros problemas. Sensiblero, feel-good y ligero. Visualmente es atractivo y tiene todos los ingredientes para un buen discurso en la gala. La alternativa parece ser The ABCs of Book Banning, que habla de un tema muy contemporáneo como es la censura. El problema es que se ve que a nivel cinematográfico es muy deficiente (es de las pocas nominadas que no he podido ver, no me lo tengáis en cuenta). Aún así, el fondo puede tirar más que la forma y el premio puede ir para nuestros amigos de la MTV.

Mejor cortometraje de ficción: Aquí la competencia está entre La maravillosa historia de Henry Sugar y Red, White and Blue. En estas categorías no suelen querer premiar el famoseo, pero Wes Anderson puede ser un nombre lo suficientemente titánico para elegirlo por defecto. Su corto es técnicamente muy superior al resto, pero Red, White and Blue trata el asunto del aborto y puede despertar más sensibilidades.

Mejor cortometraje de animación: El más convencional es War Is Over!, por lo que puede que se lleve el gato al agua por acceder a mayor parte del público. Está gustando mucho Ninety-Five Senses, pero puede que sólo sea un fenómeno de film-twitter/letterboxd. Este tipo de categorías suele estar abierta hasta el final si no está Pixar de por medio.

Este es un poco el resumen. Espero que os haya servido para preparar vuestros visionados. Recordad que los Oscar son sólo un reflejo de la industria estadounidense sobre su propio cine y raramente tienen que ver con la calidad real (si es que esto existe) de las películas. Así que ya sabéis: ¡a comer, a beber, a trasnochar y a criticar outfits de famosos!

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